FriendlyELEC acaba de lanzar la NanoPi M5, una placa de desarrollo que destaca por incorporar el nuevo procesador Rockchip RK3576, un SoC de ocho núcleos que mejora el rendimiento y la eficiencia energética frente a generaciones anteriores. Esta nueva SBC (Single Board Computer) presenta una serie de características técnicas que la posicionan como una opción atractiva tanto para desarrolladores como para usuarios avanzados interesados en proyectos multimedia, edge computing, redes o incluso aplicaciones embebidas de alto rendimiento.
La NanoPi M5 combina una arquitectura potente con una conectividad muy versátil: dos puertos Ethernet Gigabit, almacenamiento UFS 2.0, ranura M.2 NVMe para SSDs, HDMI 2.1 y hasta dos zócalos para WiFi SDIO. Estos elementos la convierten en una plataforma con aspiraciones que van más allá del hobbyismo, situándose en un terreno semiprofesional y orientado a la estabilidad, la velocidad de transferencia y la expansión.
En este artículo analizamos sus especificaciones técnicas, su potencial de uso y la comparamos brevemente con otros SBCs equipadas con el mismo procesador RK3576. También reflexionamos sobre su posicionamiento frente a placas más consolidadas como las de Raspberry Pi o Radxa, sin perder de vista las implicaciones del soporte UFS 2.0 y la doble red Ethernet en escenarios reales.
Un SBC con alma industrial: procesador RK3576 y soporte UFS 2.0
El corazón del NanoPi M5 es el Rockchip RK3576, un procesador de 8 núcleos con arquitectura big.LITTLE compuesto por 4 núcleos Cortex-A72 y 4 Cortex-A53, que pueden alcanzar hasta 2.2 GHz. Este SoC está fabricado en 6 nm, lo que mejora considerablemente la eficiencia térmica respecto a generaciones anteriores como el RK3568 o incluso el RK3399.
Este procesador se acompaña de una GPU Mali-G52 MC3 y una NPU (Unidad de Procesamiento Neural) integrada capaz de alcanzar un rendimiento de 6 TOPS, lo que permite ejecutar modelos de inteligencia artificial directamente en el borde sin necesidad de depender de servidores externos. Gracias a esta arquitectura híbrida, es posible ejecutar aplicaciones complejas como inferencias en tiempo real, procesamiento de vídeo o tareas de edge computing con eficiencia.
Otro aspecto destacado es el soporte para almacenamiento UFS 2.0, un avance considerable frente al tradicional eMMC. UFS permite velocidades secuenciales que pueden alcanzar los 850 MB/s, ideal para escenarios que requieren un alto caudal de datos, como sistemas multimedia o mini servidores NAS. Esta característica la separa claramente de otras SBC similares en su rango de precio.
Doble Ethernet, expansión NVMe y conectividad modular
Uno de los puntos fuertes de esta placa es su doble puerto Ethernet Gigabit, ideal para aplicaciones de routing, firewall, gateways industriales o redes privadas virtuales (VPN). Esta capacidad, combinada con el puerto M.2 Key M NVMe para unidades SSD, ofrece un rendimiento elevado en tareas de I/O y acceso a datos. Aunque solo hay un puerto M.2, se puede ampliar aún más el sistema con módulos WiFi o Bluetooth mediante las dos ranuras SDIO integradas, pensadas para conectividad inalámbrica modular.
La salida de vídeo se realiza mediante un puerto HDMI 2.1, compatible con resolución 4K a 60 Hz, lo cual es especialmente útil en entornos multimedia o señalización digital (digital signage). Además, se ha incluido una salida eDP, lo que sugiere un interés por parte del fabricante en facilitar su integración en sistemas embebidos con pantallas industriales o paneles táctiles.
A nivel de memoria, se ofrecen versiones con 4, 8 o 16 GB LPDDR4X, lo que proporciona suficiente margen para ejecutar sistemas Linux completos, contenedores con Docker, o incluso escritorios ligeros. También se incluye un cabezal GPIO de 24 pines para periféricos personalizados, lo que expande enormemente su versatilidad.
Un vistazo al producto: FriendlyELEC apuesta por la modularidad
La NanoPi M5, a diferencia de modelos anteriores de la misma familia, representa una clara evolución en términos de modularidad, rendimiento y enfoque. FriendlyELEC ha optado por mantener un factor de forma compacto, con una disposición de componentes eficiente, y eliminando algunos puertos convencionales en favor de conectores modulares.
Este diseño hace que la placa sea más adecuada para su integración en chasis cerrados o proyectos donde el espacio físico es limitado. Además, la elección de zócalos SDIO en lugar de incluir módulos inalámbricos de fábrica responde a una lógica industrial: permite elegir el chipset WiFi que mejor se adapte a las necesidades del entorno (ya sea con soporte para canales DFS, redes mesh, o WiFi 6).
Desde el punto de vista del software, FriendlyELEC ofrece soporte para Debian, Ubuntu y Android. Como es habitual, la comunidad será clave en el soporte a largo plazo, aunque la presencia del RK3576, ya integrado en otros productos del ecosistema open source, debería facilitar el desarrollo de imágenes personalizadas y parches de kernel optimizados.
Reflexiones adicionales: ¿una alternativa a Raspberry Pi para entornos exigentes?
La NanoPi M5 no está diseñada para sustituir a una Raspberry Pi 4 en el terreno educativo o maker tradicional. Su enfoque va claramente hacia entornos más profesionales o industriales, donde las necesidades de velocidad de transferencia, integridad de red y almacenamiento ultrarrápido son prioritarias. Con precios que están por debajo de los 100 EUR, la relación coste-prestaciones es favorable, especialmente si se consideran sus capacidades de computación paralela y almacenamiento NVMe.
A pesar de su enfoque semiprofesional, no se descarta su uso en aplicaciones personales avanzadas: desde un servidor doméstico de medios con Jellyfin, hasta una pequeña estación de IA con modelos TinyML corriendo en la NPU. El hecho de que FriendlyELEC mantenga un buen equilibrio entre precio, prestaciones y documentación la convierte en una opción sólida para quienes desean ir más allá de los límites habituales de un SBC.

Los nuevos Radxa ROCK 4D y FriendlyELEC NanoPi M5 son una gran adición al mundo de los PCs de placa única. Equipados con el procesador Rockchip RK3576, ofrecen un rendimiento sólido con núcleos ARM Cortex-A72 y Cortex-A53, gráficos Mali-G52 y una NPU para tareas de IA.
El ROCK 4D destaca por su diseño similar a Raspberry Pi y soporte para almacenamiento eMMC y UFS, mientras que el NanoPi M5 ofrece más conectividad con dos puertos Ethernet y ranuras M.2.
Ambos modelos prometen ser opciones versátiles para proyectos de tecnología y automatización. ¿Cuál te llama más la atención? 🚀