Bloom Buddy es un dispositivo interactivo que emplea sensores ambientales, sonido y visualización para asistir en el cuidado de plantas domésticas. Desarrollado por Mukesh Sankhla con tecnología de DFRobot, este proyecto combina una placa Unihiker K10 basada en ESP32 con una serie de sensores de humedad, temperatura, luz y un sistema de respuesta animada. Su propósito no es solo monitorizar el entorno de la planta, sino también ofrecer retroalimentación emocional, con sonidos y expresiones faciales que reflejan el estado del vegetal.
A través de una pantalla LCD integrada, Bloom Buddy comunica si la planta tiene sed, si se encuentra saludable o si está experimentando un entorno adverso. Todo ello se logra mediante programación basada en Python y una arquitectura pensada para expandirse con facilidad. Es una herramienta pedagógica excelente para introducir nociones de electrónica, programación y sostenibilidad a estudiantes o aficionados. A diferencia de otros dispositivos de monitorización pasiva, Bloom Buddy responde activamente y puede configurarse para emitir alertas personalizadas, reproducir sonidos almacenados en tarjeta SD o incluso interpretar patrones de riego mediante análisis histórico.
Además de ser funcional, es un ejemplo de cómo la tecnología puede fomentar el respeto y la atención al mundo vegetal de manera intuitiva y emocionalmente atractiva. En una época en la que los hogares buscan volverse más «verdes» y conectados, Bloom Buddy ofrece una solución educativa y sensorial que no pasa desapercibida.
El corazón de Bloom Buddy: electrónica accesible y sensorial
La base de este proyecto es la placa Unihiker K10, una evolución de las clásicas soluciones basadas en ESP32. Este microcontrolador, que trabaja a 240 MHz con arquitectura dual-core, se ha ganado un lugar entre los makers por su balance entre capacidad de proceso, consumo energético y conectividad (Wi-Fi 802.11 b/g/n y Bluetooth 4.2). Su compatibilidad con Python, gracias a la presencia de un entorno de desarrollo visual sobre Linux ligero, permite simplificar el desarrollo del software y añadir funcionalidades más avanzadas sin necesidad de pasar por ciclos complicados de compilación.
A nivel de entradas y salidas, el Unihiker K10 cuenta con 16 GPIOs multifuncionales, ADC integrados para la lectura analógica de los sensores y conectores Grove que simplifican la conexión plug-and-play de periféricos. Esta característica ha sido clave en la integración de sensores de humedad del suelo y ambientales sin requerir soldadura ni configuraciones complejas.
Datos ambientales que importan
El sistema incluye cuatro tipos de sensores, todos ellos seleccionados para permitir una lectura holística del entorno:
Sensor de humedad del suelo capacitivo: capta la cantidad de agua disponible para las raíces. Sus lecturas varían entre 0% (completamente seco) y 100% (saturado).
Sensor DHT11/DHT22: proporciona datos sobre temperatura y humedad relativa del ambiente, esenciales para especies vegetales sensibles.
Sensor de luz (LDR o BH1750): mide la intensidad lumínica en lux. La luz es clave en procesos fotosintéticos, por lo que una caída por debajo de 1000 lux puede activar alertas en plantas de interior.
Micrófono y altavoz: integrados para ofrecer retroalimentación sonora o incluso registrar ruido ambiental (aunque esta funcionalidad no ha sido explotada aún en el proyecto).
Todos los datos se procesan en tiempo real y se presentan de forma comprensible mediante expresiones animadas en la pantalla LCD integrada.
Un dispositivo que habla, sonríe y se preocupa
Una interfaz emocional
Uno de los aspectos más llamativos de Bloom Buddy es su uso de una interfaz emocional para comunicarse con el usuario. Inspirado en los principios del diseño afectivo (affective computing), el dispositivo muestra expresiones faciales tipo emoji en una pantalla de 240×320 píxeles y reproduce sonidos pregrabados según el estado ambiental. Por ejemplo:
Si la humedad del suelo baja del 30%, se muestra una expresión triste y se emite un sonido grave.
Si la luz es insuficiente durante más de 4 horas, se muestra un rostro somnoliento.
Cuando todos los parámetros están dentro del rango óptimo, el dispositivo sonríe y reproduce una melodía ligera.
Esta comunicación no verbal convierte el proceso de cuidado vegetal en una experiencia más intuitiva. No hace falta interpretar números: Bloom Buddy expresa lo que la planta “siente”.
Memoria y análisis del entorno
El uso de una tarjeta microSD permite almacenar hasta 32 GB de datos, incluyendo sonidos (en formato .mp3 o .wav) y animaciones. También es posible guardar lecturas históricas en archivos .csv, permitiendo una posterior visualización en hojas de cálculo o herramientas como Grafana.
La capacidad de almacenamiento abre la puerta a futuras mejoras, como el análisis de tendencias ambientales o la predicción de necesidades hídricas según patrones horarios y estacionales.
Posibilidades de personalización y expansión
Bloom Buddy ha sido concebido como un proyecto abierto y modificable. El código fuente, disponible en GitHub (enlace proporcionado en la comunidad DFRobot), permite añadir nuevos sensores, cambiar expresiones, adaptar los mensajes de audio o incluso sincronizar el dispositivo con plataformas de domótica como Home Assistant mediante MQTT.
Uno de los elementos destacables es la facilidad para editar expresiones faciales. Estas se almacenan como imágenes en la SD y pueden reemplazarse por otras diseñadas con herramientas libres como GIMP o Krita. Esto permite adaptar el dispositivo a distintos públicos, desde niños pequeños hasta usuarios avanzados.
Aplicaciones educativas y domésticas
Bloom Buddy se ha probado en entornos educativos como herramienta para enseñar conceptos básicos de programación, circuitos eléctricos, agricultura urbana y ecología. En talleres con estudiantes de primaria, ha servido como excusa para abordar el ciclo del agua, la fotosíntesis y la importancia del cuidado de los seres vivos.
También se proyecta su uso en hogares con personas mayores o con movilidad reducida, ya que proporciona avisos sonoros simples sobre cuándo regar o ventilar el entorno. En un futuro, con mejoras en el software, podría incluso integrarse reconocimiento de voz para que el usuario pregunte “¿cómo está la planta?” y el dispositivo responda con frases personalizadas.
Comparativa con otros sistemas de cuidado vegetal
Dispositivo | Tipo de comunicación | Sensores incluidos | Personalizable | Conectividad | Precio aprox. |
---|---|---|---|---|---|
Bloom Buddy | Pantalla + sonido | Humedad suelo, luz, Tº, HR | Sí | Wi-Fi/Bluetooth | 50-60 € |
Xiaomi Mi Flower Care | App móvil (Bluetooth) | Humedad, temperatura, luz, fertilidad | No | Bluetooth | 25-30 € |
Planta Sensor by Bosch | App móvil + alertas | Solo humedad del suelo | No | Bluetooth | 20-25 € |
Parrot Flower Power | App móvil (BLE) | Luz, Tº, HR, humedad suelo | No | Bluetooth | Descatalogado |
GROW Duo | Automatización riego + app | Riego automático, humedad, Tº | Parcialmente | Wi-Fi | 100-150 € |
Reflexiones finales
Bloom Buddy representa una evolución natural de los sistemas de monitorización de plantas: pasa de ser una herramienta de medición a convertirse en un compañero interactivo. La clave de su atractivo está en su enfoque emocional y didáctico, que transforma una lectura técnica en una experiencia emocional, accesible para personas de cualquier edad.
Es un ejemplo excelente de cómo la tecnología abierta puede aplicarse para resolver problemas domésticos cotidianos de manera original y eficaz. Además, fomenta habilidades prácticas, desde la programación hasta la comprensión del entorno natural, en un contexto accesible y creativo. Aunque todavía se encuentra en una etapa de prototipo, con mejoras en la precisión de los sensores y la ampliación de funcionalidades, podría encontrar un lugar en muchos hogares y aulas.
