Afortunadamente parece que salgo “ileso” de mi COVID tardío aunque con heridas de guerra y no precisamente del virus sino de los mosquitos que se han aprovechado de mi enfermedad para destrozarme piernas y manos

Nunca pensé que en octubre me iba a tener que dedicar a hacerme con todo tipo de antimosquitos para poder dormir. Ahora científicos alemanes de la Universidad Martin Luther de Halle-Wittenberg han desarrollado un nuevo tipo de dispositivo de suministro de repelente de insectos. Con la ayuda de una impresora 3D, el ingrediente activo se “encapsula” primero y se le da la forma deseada, como un anillo, que luego se puede llevar puesto y libera un agente diseñado para repeler a los mosquitos durante mucho tiempo.

Los investigadores han conseguido utilizar una técnica especial de impresión en 3D para insertar el repelente de insectos “IR3535” desarrollado por Merck en un polímero biodegradable de forma controlada de forma que se evapore continuamente manteniendo mientras tanto una barrera para los insectos. La velocidad de evaporación del repelente de insectos depende de muchos factores, como la temperatura, la concentración y la estructura del polímero utilizado.

Tras realizar varios experimentos y simulaciones, el equipo predice que el repelente de insectos necesita más de una semana para evaporarse por completo a una temperatura de 37 °C.