Si ya reultaba extraño y nada sencillo entender la «antimateria», investigadores de Oxford vuelven a liarla.
Los físicos saben desde hace cinco décadas que hay partículas subatómicas que pueden ‘saltar’ de materia a antimateria, o a la inversa.
En realidad, este comportamiento está propiciado por el efecto de superposición cuántica, y, provoca que una partícula sea de forma simultánea, valga la redundancia, una partícula y su propia antipartícula.
Ahora los investigadores han observado por primera vez es que los mesones charm oscilan entre ambos estados.
Esto significa, sencillamente, que pueden adoptar la forma de partícula, saltar al estado de antipartícula y recuperar nuevamente el estado de partícula. Todo ello de forma espontánea.
La estrategia que han utilizado para identificar este proceso durante su experimento en el LHCb es sorprendente debido a que, groso modo, ha consistido en medir la masa de las partículas con una precisión asombrosa.
Y es que el mesón no tiene la misma masa cuando adopta el estado de partícula y el de antipartícula.
La diferencia es muy pequeña (1 x 10-38 g), por lo que para conseguir medirla es necesario poner a punto una tecnología extraordinariamente precisa. Pero estos investigadores lo han logrado.
Las implicaciones que podría tener este descubrimiento son mucho más profundas de lo que puede parecer si lo contemplamos de forma superficial.
El modelo estándar, que es nuestra teoría más robusta, no explica cómo funciona este mecanismo, por lo que cabe la posibilidad de que estén involucradas en él partículas desconocidas que no pueden ser predichas por este modelo.
Encontrar una posible fisura en nuestra teoría más avanzada no es una mala noticia.
De acuerdo con el modelo estándar, durante el Big Bang debió producirse la misma cantidad de materia y antimateria, pero de haber sido así ambas se habrían aniquilado mutuamente al entrar en contacto, y el universo se habría extinguido.
Obviamente no ha sido así, por lo que debió de darse algún mecanismo que provocó la producción de una mayor cantidad de materia que de antimateria.
Esta es la asimetría de la que estamos hablando, y quizá este descubrimiento sea el primer paso hacia la solución de este gran enigma.
543