Cuando por desgracia y debido a un fallo en la tarjeta controladora que usaba, mi
pendrive principal murió sin posibilidad de reparación decidí buscar uno que colmara mis
necesidades de capacidad y velocidad, así que tras buscar en diferentes lugares de tecnología
y tiendas de informática me decidí por los archiconocidos Sandisk, en este caso en versión
Extreme, los más rápidos de su gama
Sus características anunciaban unas velocidades
más que altas y suficientes para poder leer y guardar archivos sin tener que esperar una
eternidad, Así que tras recibir el paquete de Amazon e instalar la nueva controladora USB 3.0
que aprovechara esta velocidad me puse manos a la obra.
Como es común en dispositivos
de este tipo la presentación es simple pero en este caso de un mínimo de calidad.
La caja viene en color negro con la foto del producto, su capacidad y velocidades máximas
que puede alcanzar En la parte trasera tenemos los datos del mismo en diferentes idioma incluyendo
el castellano
Al abrir la caja encontramos el pendrive metido en un blister de plástico termo sellado. Una vez
abierto podemos ver la unidad con un tamaño medio, unos 60 milímetros con el conector USB retraído.
Personalmente prefiero los pendrives sin capucha, al final acabas perdiéndola en cuanto cogen un
poco de holgura con el uso. Sin embargo podría se un poco más pequeño para no abultar mucho,
aunque no es ancho como para molestar a los puertos USB cercanos.
En la parte de atrás tenemos su nombre y capacidad para que no haya dudas. Como es común en
muchos de los aparatos electrónicos, éste está fabricado en China.
Al sacar el USB se queda
bien fijo sin dar sensación de que se vaya a retraer accidentalmente.
Ahora llegamos al momento de la verdad, vamos a ver si realmente cumplen con las velocidades
que prometen. Para ello utilizamos el archiconocido CrystalDiskMark. Los resultados quedan tal que
así:
Primero quise probar cómo funciona en un puerto USB 2.0 para saber si aprovecharía todo el
ancho de banda y los resultados han sido para mí los esperados.
En USB 3.0 es donde sacamos verdadero rendimiento a este pendrive. Aunque no es tan rápido
como prometen sí nos da unos resultados más que buenos para lo que esperamos de él. Debemos
tener en cuenta que la velocidad depende del ordenador y de su controladora USB 3.0.